Vale que Manager Zone es un juego mediocre, que tiene un simulador de auténtica pena, que no es absolutamente necesario pagar para jugar, etcétera, pero precisamente por todo eso, lo que queda es un pasatiempo, con el que interactuar con amigos conocidos o con nueva gente alejada de ti. Nada más.
Sin embargo, al parecer hay personas que necesitan de apropiarse de un chiringuito virtual para sentirse más y mejor que los demás, aunque sea en un puto mundo virtual que, realmente, a nadie más le importa.
Como resultado de ese comportamiento infantil, no se tolera la competencia, y mucho menos si se trata de otras personas que tienen un concepto distinto del juego. Porque MZ es un juego, no un cortijo, por mucho que algunos lo quisieran.
La libertad de expresión, manda huevos, ha sido fulminada en un miserable foro de supuestos jugadores que era más aburrido que un discurso del difunto Chavez (al que le limpiaría los bajos el casposo si estuviera vivo) reproduciéndose en bucle, donde lo más animado era alguna queja de algún usuario que se sentía engañado.
Y no es el asunto baladí. No puedes entrar en un foro, hacerlo divertido, y presentar una candidatura a seleccionador nacional. Eso sí que no. Intolerable. Habrá que mostrar la más fina de las pieles para argumentar que la chanza amistosa es una ofensa y borrar todo rastro de la disidencia, pues, al fin y al cabo, la publicidad es la publicidad, y es bueno siempre que hablen de uno, para bien o para mal, pero no de la competencia. Es miiiiio, mi tessssssorooooo.
Todo esto deja la puerta abierta a más interpretaciones y sospechas. ¿Quién comprueba el recuento de votos? ¿Es de fiar? ¿Habrá que exigir la presencia de observadores internacionales? ¿Será su trabajo respetado, si es que les autorizan a presentarse?
VIVA LA FEDERACIÓN MOCACOS, LA ÚNICA CON LO QUE HAY QUE TENER.
